¿Y si no hubiera cambio climático?

Los salesianos lo hicieron bien conmigo, demasiado bien. Me paso la vida dudando de todo: de lo que veo, de lo que creo que veo, de lo que no veo y de lo que no sé si veo. Dudo, luego existo. En estos días he estado leyendo teorías que ponen en duda el Cambio climático. Si yo no lo he entendido mal (que es posible que si), hay dos visiones claramente enfrentadas:
  • De un lado están los que creen que la concentración de CO2 en la atmósfera es el principal responsable de las variaciones de temperatura en la misma: a más CO2 y gases de efecto invernadero, más temperatura. Y, dado que la actividad humana ha estado generando un aumento vertiginoso de estos gases, estamos llevando al planeta hacia un calentamiento acelerado cuyas consecuencias podrían ser muy peligrosas.
  • De otro lado se encuentran los que mantienen que las variaciones en el clima y en la temperatura global se encuentran explicados por la actividad solar en mucha mayor medida que por la concentración de CO2. Es más, si esta teoría es cierta no nos estaríamos acercando a una época más cálida, sino a una era glacial, allá por el 2030.
Que unos u otros tengan razón tiene indudables implicaciones económicas, al menos es lo que plantean los de la segunda opción. Si resulta que el CO2 no influye en el clima y es la actividad solar la que manda, el Protocolo de Kioto y demás medidas de reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero son costes innecesarios.
Sin embargo, en mi modesta opinión, aunque resultase que es el sol y no el CO2 el culpable de las variaciones metereológicas, muchas de las medidas que se están tomando siguen siendo necesarias en cualquier caso. Buscar energías más limpias y sostenibles no es ninguna estupidez, es un ahorro a futuro clarísimo: el petróleo tarde o temprano se agotará. Y esta investigación está creando nuevos sectores económicos que generan empleo y riqueza en el presente y lo seguirán haciendo en el futuro. La mejora de los procesos de combustión de los coches en Europa, por ejemplo, ha significado una mejora de la calidad del aire que tiene su reflejo en menores problemas respiratorios en la población: eso es un ahorro actual para los sistemas de salud.
Por otro lado, que el CO2 no sea el responsable del cambio climático no descalifica la afirmación de que el hombre está transformando los ecosistemas terrestres a una velocidad brutal. La deforestación sigue siendo un problema con o sin cambio climático; el agotamiento de pesquerías, como la del atún rojo, sigue disminuyendo nuestras fuentes de nutrientes y el crecimiento de nuestra población somete a la naturaleza a una dura prueba en todos los rincones del mundo.
Así que vuelvo a lo de los contables: prudencia valorativa. Es posible que no tengan razón los expertos de la ONU, es posible que los de GREENPEACE estén generando miedo en la población porque denigran la civilización que hemos alumbrado. Pero, ¿y si finalmente tienen razón? ¿Y si llega 2030 y hace más calor? ¿Y si descubrimos que no hicimos nada porque supusimos que el CO2 no tenía importancia?
Mejorar nuestra calidad de vida y la de nuestros hijos y nietos, es un objetivo en el que supongo podemos estar de acuerdo todos. Si las políticas anticambio climático contribuyen a ello, ya habremos ganado algo. Y no es una ganancia menor.

Comentarios

  1. interesantes planteamientos, tu si q eres un tipo modesto! creo q tus que tal si no te dejan en un lado u otro lo q me parece saludable... pocas cosas tenemos los seres huamanos como sociedad q hacer, como dices tu como individuos se puede hacer mucho, toca q me cambie a mi, q te cambies a ti, a tus hijos y tus nietos a llevar una vida mas saludable, dar ejemplo es un buen evangelio... saludos

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